Un grito de auxilio por el bagre rayado del Magdalena

De manera voluntaria y con e único fin de proteger las poblaciones de bagre en el Magdalena Medio santandereano, dos comunidades de 202 pescadores trabajan con investigadores en un proyecto piloto de conservación. Su nivel de compromiso es tal que en la última veda llegaron a un cumplimiento del 100 por ciento. No capturaron bagre para permitir que este se reproduzca. Ahora lo único que falta es convencer a las autoridades para que los apoyen cambiando la fecha de la veda y permitiéndoles trabajar en proyectos de reforestación y limpieza de caños y ciénagas.