Rodrigo de Oliveira Andrade / Scidev.net
SÃO PAULO. El uso generalizado de pesticidas —sustancias químicas o biológicas que protegen los cultivos contra el ataque y la proliferación de plagas— estaría relacionado con un aumento del número de muertes causadas por cáncer de colon en Brasil.
Para llegar a esa conclusión, investigadores de Alemania, Brasil y el Reino Unido mapearon el uso de pesticidas en los 26 estados del país, más su Distrito Federal, y los cambios en las tasas de mortalidad por cáncer de colon ocurridos entre 2000 y 2012 en esos mismos lugares.
Observaron que la mortalidad por cáncer de colon había aumentado en este período y se relacionaba con la cantidad de pesticidas vendidos y usados en el país. El estudio fue publicado a principios de octubre en la revista Chemosphere.
Analizando bases de datos públicas, verificaron que en 2000 se vendieron poco más de 162 millones de toneladas de pesticidas en Brasil. En 2012, el número había aumentado a aproximadamente 476 millones de toneladas, según el Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (Ibama), organismo del Ministerio del Medio Ambiente.
En el mismo período, los datos recopilados por el Ministerio de la Salud indican que el número de muertes causadas por el cáncer de colon aumentó de 946.686 a poco más de un millón. Su conclusión es que los pesticidas aplicados en los cultivos brasileños han estado contaminando los recursos utilizados para alimentar a la población y al ganado.
“Creemos que la exposición a pesticidas puede ser un factor de riesgo potencial para el cáncer de colon, y este hecho requiere una atención urgente del gobierno para monitorear la exposición de los brasileños a tales químicos”.
Vinicius Kannen, Universidad de São Paulo
“Los resultados demuestran un fuerte vínculo entre pesticidas y mortalidad de cáncer de colon y, como tal, no se pueden ignorar”, señaló Francis Martin, bioquímico de la Escuela de Farmacia y Ciencias Biomédicas de la Universidad Central de Lancashire, en Inglaterra, uno de los autores del estudio.
“Ahora es fundamental determinar si las exposiciones tienen el potencial de convertir las células normales en células cancerosas, independientemente de que actúen como alteradores endocrinos o que dañen el ADN”, remarcó.
El cáncer de colon es una de las principales causas de muertes relacionadas con tumores, mientras que varios estudios epidemiológicos sugieren que los pesticidas son un factor de riesgo para la formación de ese tipo de cáncer en humanos y roedores.
A pesar de esas evidencias, ningún estudio había verificado una correlación entre el aumento en la venta y uso de esos productos y el aumento de la incidencia de cáncer de colon.
“Varios grupos de investigación han informado altos niveles de pesticidas en la leche materna en el país en los últimos años”, afirma Vinicius Kannen, patólogo del Departamento de Toxicología, Bromatología y Análisis Clínicos de la Universidad de São Paulo y coautor del estudio.
“También se ha informado que los residuos de pesticidas en la leche bovina superan los estándares de seguridad en algunas regiones brasileñas, mientras que según la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa), el 20 por ciento de las muestras de alimentos analizadas entre 2013 y 2015 no eran seguras para la ingesta humana, por contener rastros de pesticidas”, prosigue.
La venta de pesticidas mueve alrededor de US$10 mil millones por año en Brasil, lo que representa el 20 por ciento del mercado global, valorizado en US$50 mil millones. En 2017, los agricultores brasileños utilizaron 540.000 toneladas de ingredientes agroquímicos activos, 50 por ciento más que en 2010, según el Ibama.
Brasil es el mayor consumidor de pesticidas del mundo, incluso de muchos prohibidos en Europa, según Larissa Bombardi, geógrafa de la Universidad de São Paulo, quien no participó de la investigación.
“Creemos que la exposición a pesticidas puede ser un factor de riesgo potencial para el cáncer de colon, y este hecho requiere una atención urgente del gobierno para monitorear la exposición de los brasileños a tales químicos”, señala Kannen.
La polémica
El debate sobre el uso de agroquímicos se ha intensificado en los últimos meses en Brasil debido a un proyecto de ley aprobado por un comité de la Cámara de Diputados en junio, que propone cambiar las reglas para el registro y el uso de nuevos pesticidas agrícolas.
Actualmente, el proceso de aprobación de pesticidas es revisado por tres agencias gubernamentales: el Ibama, la Anvisa y el Ministerio de Ganadería y Abastecimiento, lo que toma un promedio de 5 a 8 años hasta su finalización.
La nueva legislación pretende acelerar este proceso mediante la creación de un órgano que tendría el propósito de aprobar o desaprobar las propuestas de nuevos pesticidas, ya sea para uso experimental o comercial. La comisión se establecería dentro del Ministerio de Agricultura, con carácter consultivo y deliberativo, y tendría poderes para regular gran parte de la nueva ley de plaguicidas. Para entrar en vigor, todavía debe ser aprobada por el Pleno de la Cámara de Representantes y el Senado y recibir la aprobación presidencial.
Si se aprueba el cambio —sentencia Bombardi— “se liquidará el escaso principio de precaución que tenemos”.
Y Kannen cree que “mientras las autoridades deben supervisar la actividad de las empresas de agroquímicos y biotecnología agrícola, los agricultores deben ser informados mediante programas de sensibilización para mejorar la calidad de sus productos sin dañar a la población humana con altos niveles de residuos de pesticidas en el medio ambiente y los alimentos”.
Enlace al estudio completo en Chemosphere
El estudio publicado en la revista Chemosphere es resultado de un proyecto apoyado por FAPESP, uno de los donantes de SciDev.Net.