Hora del planeta, un apagón por la vida
Este año el tradicional apagón que WWF promueve invita a personas de todo el mundo a unirse en un momento de reflexión realiza este sábado 26 de marzo de 8:30 a 9:30 p.m., hora local. En Colombia, además del apagón en varios lugares emblemáticos, habrá un día lleno de actividades y de reflexión en el Parque Jaime Duque.
Las luces se comienzan a apagar y durante una hora -por una vez al año- muchos colombianos pensarán en su relación con el planeta.
Esta campaña de WWF nació en Sídney, Australia, en 2007, y ha crecido hasta convertirse en una de los movimientos más grandes del mundo. Actualmente acoge a individuos, comunidades, empresas y organizaciones en más de 180 países y territorios para tomar acciones
ambientales.
Desde la Ópera de Sídney, donde comenzó La Hora del Planeta en 2007, pasando por la Puerta de la India en Nueva Delhi, el Phoenix Center de Beijing en China, la Puerta de Brandenburgo en Alemania, el Coliseo de Roma en Italia, el Empire State en EE. UU. y e Cristo Redentor en Brasil, múltiples lugares icónicos del mundo participarán en el apagón simbólico que este año vela por un futuro más seguro, más justo y más sostenible para todos.
En Colombia el apagón será de 8:30 a 9:30 este sábado 26 de marzo, el acto central se realizará en en el Parque Jaime Duque, ubicado en el municipio de Tocancipá. Allí, a lo largo del día, además de las actividades y atracciones que el Parque ofrece regularmente, los asistentes podrán realizar múltiples actividades en sintonía con la conservación del planeta y participar del lanzamiento de un circuito ambiental que busca fomentar prácticas de consumo sostenible en la gente, denominado ‘Nuestro Planeta’.
Muchas causas
“Históricamente, la Hora del Planeta se ha centrado en las crisis climáticas, pero más recientemente, se ha esforzado en poner en primer plano el problema de la pérdida de la naturaleza. El objetivo es crear un movimiento imparable para la naturaleza, igual que cuando el mundo se unió para acabar con el cambio climático. El movimiento reconoce el papel de los individuos en crear soluciones a los retos medioambientales más acuciantes del planeta y aprovechando el poder colectivo de sus millones de seguidores para impulsar el cambio”.
La Hora del Planeta cuenta con el apoyo del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protecciónde la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU, por sus siglas en alemán) de Alemania, con financiación de la Iniciativa Internacional sobre el Clima (IKI, por sus siglas en alemán), como
parte del proyecto “Ampliación de la comunicación sobre la biodiversidad”.
WWF espera que más de 190 países y territorios se vincule este 26 de marzo por las personas y el planeta:
• Grecia destacará el importante papel que juegan los alimentos en la creación de comunidad e identidad, además de ofrecer información sobre la creación de dietas sostenibles y prácticas de producción de alimentos.
• Sudáfrica se centrará en la próxima COP15 de biodiversidad de la ONU y buscará obtener firmas de peticiones para ayudar a “Definir nuestro futuro”.
• Tanzania tiene como objetivo ayudar a todos los estudiantes, desde el nivel primario hasta el universitario, a plantar y nutrir un árbol hasta que terminen la escuela o la universidad. La campaña espera plantar más de 14 millones de árboles durante su implementación y se lanzó el 21 de marzo, Día Internacional de los Bosques.
• India conmemorará su 75º año de independencia y reconocerá los esfuerzos de 75 héroes de la conservación, compartiendo las historias inspiradoras de cómo estas personas han ayudado a “Definir nuestro futuro”.
• El Reino Unido instará a las personas a participar en el momento del apagón y a descargar la aplicación My Footprint, la cual les permitirá calcular los efectos de su estilo de vida en el planeta y lo que pueden hacer en su vida cotidiana para reducir su huella.
Algunos logros de La Hora del Planeta
Desde su inicio en 2007, La Hora del Planeta ha inspirado iniciativas globales para proteger la naturaleza, el clima y el medio ambiente, ayudando a impulsar la concientización, la acción y el cambio en distintas políticas.
El movimiento ayudó a la creación de 3.4 millones de hectáreas de áreas marinas protegidas en Argentina y de un bosque de 2.700 hectáreas en Uganda en honor a este movimiento; aseguró una nueva legislación de protección de los mares y bosques en Rusia; impulsó la prohibición de los plásticos de un solo uso y de los productos de espuma de poliestireno en la capital ecuatoriana; e inició la plantación de 20,000 plántulas de mangle en 13 ciudades de Indonesia.