El 70% de las visitas de turistas colombianos y extranjeros ha sido al parque Uramba bahía Málaga.
El punto de encuentro es el Pacífico. Cada año entre julio y noviembre miles de ballenas yubartas o jorobadas (Megaptera Novaeangliae) dejan las gélidas aguas antárticas y recorren 8 mil kilómetros hasta las templadas aguas del Pacífico.
Es aquí donde se reúnen unos 3 mil ejemplares para desarrollar su etapa reproductiva que comprende fecundación, gestación y nacimiento de los ballenatos.
Los Parques Nacionales Naturales Uramba Bahía Málaga, Gorgona y Utría, son el lugar que acoge a estos gigantes mamíferos durante cinco meses en que se realiza el cortejo, nacimiento y crianza de los cetáceos. También se escuchan los cantos para llamar la atención o seducir a la hembra, que pueden durar hasta 50 minutos y alcanzar una distancia de 25 kilómetros bajo el agua.
Es en este tiempo que también llegan decenas de visitantes colombianos y extranjeros para ver a los enormes cetáceos, escuchar sus llamados y observar de cercan sus grandes saltos.
Este año los tres parques nacionales esperan unos 30 mil visitantes, 5 mil más que el año pasado, pero a solo dos meses de la temporada el reporte de Parques Nacionales Territorial Pacífico indica que ya han llegado 27 mil personas a avistar a las ballenas.
Mientras las embarcaciones toman turnos para llevar a los turistas a los lugares de observación, un grupo de investigadores realiza un conteo de los mamíferos y realiza un monitoreo del proceso reproductivo.
Autoridades recomiendan:
Las autoridades recomiendan a los visitantes no olvidar las pautas y precauciones al momento de acercamiento con la especie y las normas de manejo de residuos sólidos y cuidados con el entorno.
Zona de espera y embarcaciones:
Atender la inducción de 10 minutos sobre la importancia del Área Protegida y su rol en los procesos ecológicos como reproducción, parto, crianza, lactancia y socialización de las ballenas.
Verificar que las embarcaciones porten un banderín o distintivo de autorización de avistamiento.
Asegurarse que en las embarcaciones vaya un intérprete ambiental.
Tener presente que la observación de los cetáceos podrá realizarse por orden de llegada de las embarcaciones.
Recordar que el horario permitido para que las embarcaciones realicen el avistamiento es de 8:00 a.m. a 4:00 p.m. cada día.
Si se encuentra una sola embarcación en el área de avistamiento se sugiere que no permanezca por un tiempo superior a 30 minutos.
Si hay más de una embarcación, el periodo de tiempo no debe exceder los 15 minutos. Se recomienda un número máximo de tres embarcaciones simultáneas en actividad de avistamiento a un mismo individuo o grupo.
El acercamiento debe realizarse de modo lento, de forma paralela y siempre por detrás.
Es indispensable mantener una distancia de 200 metros sobre los individuos.
Se permiten máximo cinco embarcaciones con un grupo de ballenas manteniendo siempre el motor en neutro.
No se deben seguir a las hembras con sus ballenatos.
Se debe operar a baja velocidad y nunca superar los 10 kn o los 18 km/h.
Usar chaleco salvavidas mientras permanezca en la lancha
No ingerir licor antes, durante o después del avistamiento
No arrojar ningún elemento por fuera de la lancha
No suministrar alimento a las ballenas
Utilizar ropa y zapatos cómodos
Aplicar bloqueador y repelente
Usar gorra y llevar capa impermeable
Otras recomendaciones:
Ruidos: en el momento de avistar mamíferos acuáticos se recomienda mantener un tono de voz bajo, evitando generar ruidos fuertes dentro y fuera del agua como gritos, risas, silbidos, sonidos grabados o usar ecosondas entre otros. De igual forma se recomienda no arrojar elementos al agua que puedan perturbarlos ni dar golpes en la superficie del agua o de la embarcación.
Interacción y alimentación: en ocasiones, algunas especies de mamíferos acuáticos se aproximan lo suficiente a embarcaciones o a infraestructuras costeras, lo que permite una interacción muy cercana con las personas. En estos casos se recomienda evitar cualquier tipo de contacto con los individuos. Se recomienda no alimentar, ni provocar deliberadamente el acercamiento de los animales usando atrayentes como comida.
Se recomienda no realizar un acercamiento a individuos con crías, en apareamiento o en actividad de parto.
Foto superior: ©Fundación Yubarta