©Instituto Humboldt
En los alrededores de Bogotá, se encuentra un bosque altoandino de 14 mil hectáreas, que ha sorprendido a los científicos que investigan su biodiversidad. Gracias al uso de cámaras trampa, la Reserva Forestal Protectora Bosque Oriental de la capital de Colombia, viene revelando sus misterios.
El proyecto Bogotá Biodiversa, liderado organizaciones colombianas e internacionales, se inició en el 2013 y es, según el investigador José Fernando González-Maya, “uno de los proyectos más grandes de monitoreo con cámaras trampa en el país, y el más grande en un ecosistema periurbano, resaltando su esfuerzo de muestreo en una zona urbana, incluso para Latinoamérica”.
Estos son algunos de los animales que viven en los Cerros Orientales de Bogotá:
El cusumbo mocoso
Este mamífero (Nasuella olivacea), que alcanza los 39 centímetros, es uno de los animales más misteriosos de la zona. Muy poco se conoce sobre los hábitos de la especie, pero se sabe que puede bajar cabeza abajo los árboles, gracias a sus fuertes miembros anteriores y sus tobillos reversibles. Se alimenta principalmente de frutas, vegetales, insectos y vertebrados pequeños.
Tigrillo lanudo
El registro de este felino (Leopardus tigrinus) sorprendió a los investigadores, quienes pensaban que este especie, y otras emblemáticas de los Cerros Orientales de Bogotá, la expansión urbana, las presiones como la cacería y la deforestación de los dos últimos siglos alrededor de la capital colombiana.
El mapurito
Los investigadores también se sorprendieron al encontrar al zorrillo o mapurito (Conepatus semistriatus), famoso las rayas blancas en su espalda y por defenderse con su oloroso almizcle. No se sabía que este pequeño carnívoro vivía en el área periurbana de Bogotá.
La versión original de este reportaje, publicada en mayo del 2017, fue escrita por María Lourdes Zimmermann. Aquí la historia completa
ALIANZA INFORMATIVA
MONGABAY LATAM – RED PRENSA VERDE