A través de pautas específicas los científicos orientan a la población para que aporte a un estudio sobre las características y radio de emisión del material particulado.
Un proceso de ciencia ciudadana para hacer un muestreo de las cenizas del volcán Cumbre Vieja, aún en erupción, desarrolla un grupo de investigadores en Las Canarias.
Como se conoce, el volcán Cumbre Vieja, ubicado en la isla La Palma perteneciente al archipiélago español de Las Canarias, ubicado al noroeste de África, hizo erupción el pasado 19 de septiembre. Imágenes de la lava devorando viviendas recorrieron el mundo y la llegada de estos materiales al mar han sido relatados minuto a minuto. En las últimas horas, la lava, con unos 1000 grados de temperatura, alcanzó el mar.
Hacia la zona de erupción han llegado decenas de equipos científicos. Uno de estos grupos es el que conforma el Instituto Geológico y Minero de España, que acaba de lanzar una propuesta de acción inmediata de ciencia ciudadana para que entre investigadores y comunidad estudien las emisiones del Cumbre Vieja.
El fin es realizar unas guías de distribución de cenizas y analizar su composición, tamaño y espesor. Se buscan aportes de personas que en La Palma y en general en el archipiélago -conformado por ocho islas-, puedan vincularse al proceso, explicó Juana Vegas, investigadora del Instituto Geológico.
Dadas las circunstancias y teniendo en cuenta que el volcán sigue en erupción, la gente a través un procedimiento específico, indicado por los investigadores, puede aportar tomando directamente las muestras de la ceniza.
Para hacerlo un ciudadano debe elegir una superficie plana donde haya un espesor representativo de material emitido. Luego debe dibujar un cuadrado de 30×30, marcarlo, y tomar las coordenadas con una aplicación de celular o en caso de que no lo tenga, describir correctamente el sitio.
También debe hacer una breve descripción sobre la apariencia del lugar y en lo posible con una espátula y una brocha, tomar la ceniza y depositarla en una bolsa zip. Luego debe marcarla con las letras LP 21 – C (que significan La Palma, el año 2021 y C de ceniza), poner un número, indicar la fecha y el nombre de la persona recolectora. Posteriormente, puede hacerla llegar a cualquiera de los cabildos, ya avisados para recibir las muestras.
De esta forma los científicos aspiran recolectar material de muchos lugares y así armar una especie de rompecabezas con los componentes de las cenizas, analizar su alcance y rango de distribución en el archipiélago y áreas cercanas.